sábado, 11 de abril de 2015

Reventando las pompas de jabón.

"Si el amor es verdadero, no se quiebra; no abandona".
Maná (Drama y Luz 2011), México.



Y con ese pequeño extracto de la canción "El verdadero amor perdona" de Maná, iniciamos la reflexión de la semana que he decidido titular "Reventando las pomas de jabón".


         Muchos viven inmersos en el engaño de que si dentro de una relación (ya sea de adolescentes o adultos) cuando vuelven y terminan; vuelven y terminan; así sucesivamente... es algo "real" o "infinito" pero, hoy les vengo a desnudar la verdad. O como la banda mexicana #MANÁ diría "Reventar las pompas de jabón".

 Cuando leía a Borges y a Sartre; me hallé con muchas sorpresas como por ejemplo que la juventud vive tan ciega y alejada de la realidad de una relación: Todo tiene un Alpha y un omega; incluso las relaciones de un año o dos que ya se dicen "Te amo para siempre".

El humanismo literario nos transmite una pequeña nausea de lo que ignoramos lamentablemente; la ceguera de los estereotipos mundial hacen que no prestemos atención a esto y cuando terminamos heridos, sea como tocar la carne humana.

Les traigo esta vez con una pequeña historia que he podido recoger en base a algunas experiencias leídas en diversos libros humanistas y románticos:

    "Todo comienza en la pequeña pseudociudad de Italia en una parte de América Latina; donde vivía Héctor, un joven de 19 años que cursaba sus estudios en Ingeniería Agroindustrial y ya estaba 3 años con Cintia, una hermosa chica que había decidido dedicar su vida al arte abstracto. 

El pueblo entero hablaban de los misterios de su relación ya que el día era se les veían tan amorosos; y en las noches a veces apasionadas con un ligero toque de peleas tontas.

Terminaron por una tonta pelea en una noche de Diciembre, Héctor logró  conseguir una beca a Brasil y se fue, pero ¿qué pasó en ese tiempo? Todo se hallaba en un rencor tonto, en unos encuentros y sacadas de vueltas que no debían haberse dado. Cintia logró malograr la reputación de Héctor y poner a sus amigos en contra de él.

Pasaron 10 años y al final, Héctor llegó a tener un PhD en su área y Cintia no pude ni lograr publicar alguna obra de arte fuera de su tierra. 

MORALEJA:
"Duela a quién le duela, el amor no es un juego; Maná cuando habla del verdadero amor perdona; hace referencia a un amor que se ha forjado con el tiempo paciencia y cariño. No siempre todos son lo que sus caras y expresiones transmitan. Si TERMINAN alguna relación no es el fin del mundo, su carrera, sus sueños; son lo que más deben importarles. Cuando todo eso se esfumen, preocúpense seriamente"

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